Ya hemos pasado por esto:
Un niño en el que nadie creyó
El ascenso de Godoy
La guerra en el mar
Trafalgar
A hostias con Godoy
El niño asustado y envidioso de Carlota
Escoiquiz el muñidor
La conspiración de El Escorial
El
rey Carlos fue prontamente informado por Caballero, al regresar de la
cacería, de las confesiones de su hijo, y de la fundamental de ellas,
que era su sintonía con los franceses. Caballero, lógicamente,
había esperado a la llegada del rey para informar por primera vez de
aquellos extremos, por lo que fue el Borbón quien directamente
informó a Godoy. Era una situación muy delicada. Francia y España
eran aliados estrechos, hasta el punto de que las tropas de Napoleón
estaban cruzando el país, camino de Portugal, país que ambicionaban
invadir ambas armadas de forma combinada; y ahora se descubría que
Napoleón, el hombre más poderoso del mundo, estaba combinando esa
colaboración con una conspiración para cambiar a la persona sentada
en el trono de España. Cabía incluso la posibilidad de que
Napoleón, suponiendo o conociendo las dificultades de su parcial,
llegase a decretar el desvío en la trayectoria de sus tropas,
haciéndolas pasar por Madrid para hacer valer por la fuerza al
príncipe de Asturias.