Recuerda que esta serie se compone de:
La paz del 382 devolvió relativa paz a los territorios balcánicos del Imperio durante años. Sin embargo, ya en el 405, y otra vez en el 408, las cosas volvieron a complicarse, a causa de cuatro grandes incursiones que complicaron enormemente las cosas. En realidad, fue en estos primeros años del siglo V cuando para el Imperio se hizo evidente la que sería, en verdad, la principal amenaza hacia su caída: la invasión demográfica. En el mundo antiguo no había propiamente fronteras. Eran escasos los muros y no se habían inventado las concertinas. Contra lo que habitualmente se suele pensar, muchas de las invasiones de los tiempos antiguos no fueron lo que nosotros imaginamos: tipos a la carrera, voceando consignas guerreras. Buena parte de las invasiones antiguas fueron realizadas por gentes que, simplemente, cambiaron de lugar donde vivir, y cambiando modificaron el equilibrio demográfico de los lugares a los que llegaron. Entre las invasiones de principios del siglo V hay, desde luego, ejemplos de actitud guerrera, como es el caso de Radagausio. Pero también hay, y mucho, simple y puro desplazamiento de masas de gente. La diferencia entre las gentes de entonces y las de hoy es que las presentes se encuentran con la policía.
- Las envidias entre Valente y Graciano y el desastre de Adrianópolis.
- El camino hacia la primera paz con los godos.
La paz del 382 devolvió relativa paz a los territorios balcánicos del Imperio durante años. Sin embargo, ya en el 405, y otra vez en el 408, las cosas volvieron a complicarse, a causa de cuatro grandes incursiones que complicaron enormemente las cosas. En realidad, fue en estos primeros años del siglo V cuando para el Imperio se hizo evidente la que sería, en verdad, la principal amenaza hacia su caída: la invasión demográfica. En el mundo antiguo no había propiamente fronteras. Eran escasos los muros y no se habían inventado las concertinas. Contra lo que habitualmente se suele pensar, muchas de las invasiones de los tiempos antiguos no fueron lo que nosotros imaginamos: tipos a la carrera, voceando consignas guerreras. Buena parte de las invasiones antiguas fueron realizadas por gentes que, simplemente, cambiaron de lugar donde vivir, y cambiando modificaron el equilibrio demográfico de los lugares a los que llegaron. Entre las invasiones de principios del siglo V hay, desde luego, ejemplos de actitud guerrera, como es el caso de Radagausio. Pero también hay, y mucho, simple y puro desplazamiento de masas de gente. La diferencia entre las gentes de entonces y las de hoy es que las presentes se encuentran con la policía.