Los súbditos de Seleuco
Tirídates y Artabano
Fraates y su hermano
Mitrídates
El ocaso de la Siria seléucida
Y los escitas dijeron: you will not give, I'll take
Roma entra en la ecuación
El vuelo indiferente de Sanatroeces
Craso
La altivez de Craso, la inteligencia de Orodes, la doblez de Abgaro y Publio el tonto'l'culo
... y Craso tuvo, por fin, su cabeza llena de oro
Pacoro el chavalote
Los partos, aparentemente, tomaron algún partido en la guerra civil
que siguió al asesinato de Julio. Los indicios son de que en
el año 46 antes de Cristo, los partos enviaron un grupo de arqueros
montados en ayuda de un tal Baso, quien muy probablemente fue el
aguililla de turno que, aprovechando el follón que había en la
metrópoli, estaba intentando convertirse en rey independiente de
Siria. Estos mercenarios de Baso acabaron instilándose a las tropas
que Casio estaba reclutando en el este para presentar batalla a Marco
Antonio y Octavio, y muy probablemente la pequeña fuerza parta acabó
con ellos. De hecho, Casio parece que trató que Orodes le prestase
más gente. Le pagó a la pequeña fuerza de partos una suma
considerable y los mandó a casa, pero eso lo hizo mientras también
enviaba legados al encuentro de Orodes; claramente, pues, estaba
tratando de transmitir la idea de que su bando era buen negocio antes
de tratar de alquilar una fuerza mayor.