1.- Aunque no lo tengo totalmente adverado, estoy por apostarme con cualquier de vosotros una mesa de comedor a que la persona que, en tiempos del franquismo, ocupó más cargos de gobierno, fue el almirante Luis Carrero Blanco. BOE en mano, Carrero ocupó nada menos que sesenta cargos de gobierno en los casi cuarenta años de régimen franquista.
El truqui del dato está en que Carrero fue utilizado por Franco como comodín para sustituir a decenas de ministros diferentes, muy particularmente los militares, en casos en los que éstos abandonaban sus responsabilidades (viajes, enfermedades, interregnos, etc.)
La enorme productividad de Carrero contrasta con la sobriedad de Franco. BOE en mano, Franco fue designado presidente del Consejo de Ministros en 1936, y dejó el cargo en 1973 (precisamente, en favor de Carrero). Y punto pelota.
2,. El Estado español creó el monopolio del petróleo y el impuesto indirecto a los carburantes en los años veinte del siglo pasado, en plena dictadura del general Primo de Rivera. El factótum de aquello fue el ministro José Calvo Sotelo. Entonces, los impuestos indirectos que había en España gravaban el tabaco, las cerillas y algún otro producto.
El Estado español buscaba un bien ampliamente consumido, que por lo tanto diese pingües ingresos fiscales; pero que, al tiempo, no fuese fundamental para la vida de las personas, y así no generar tensiones sociales. El primer producto que se planteó fue el bacalao. Pero en aquel entonces, el bacalao era la comida de los pobres en España, así pues, se desechó esa posibilidad por la resistencia social que generaría.
3.- Quienes saben algo de cultura social japonesa saben que, cuando en el marco de un encuentro formal, un japonés te hace un regalo, es de muy mala educación guardárselo. Hay que abrirlo allí mismo y hacer aspavientos al verlo (aunque sea una chorrada, que suele serlo). Esta costumbre social está muy enraizada en la cultura japonesa.
El Kakun, normalmente traducido como Instrucciones de familia, fue escrito por un noble de la Corte de Kioto, Hojo Shigetoki, para su hijo Nagatoki después de que éste, en 1247, fuese nombrado Rokuhara Tandai, algo así como adjunto al Shogun. Nagatoki entonces tenía 18 años y era inexperto.
Una de las cosas que explica Shigetoki en su jugoso libro es cómo actuar cuando un samurái o un noble recibe un caballo de regalo de una persona de nivel superior. De forma un tanto parecida a las costumbres actuales, Hojo instruye a su hijo en el sentido de que no debe, en ningún caso, limitarse a ordenarle a un sirviente que se lleve el caballo al establo. Deberá tomar él las riendas del animal y, sólo después, se las tenderá al sirviente.
Si el regalo proviene de algún noble con el que no se tenga una especial relación o dependencia, se escogerá a un joven samurái de buena familia y se le encargará en público que sea él quien se lleve el caballo al establo, sin necesidad de tocarlo primero.
4.- Halfdan Ragnarsson es un personaje cuya historicidad está en cuestión. Hay personas que piensan que fue un caudillo vikingo; que fue hijo de Ragnar Logbrok; y que dirigió a la gran armada vikinga que, en dos oleadas, invadió Inglaterra en la segunda mitad del siglo IX. Hay quien piensa que sólo algunas de esas cosas son ciertas, y hay quien piensa que Halfdan nunca existió y que es, en realidad, una especie de amalgama de datos de diversos caudillos vikingos.
En esta indefinición, lo que si sabemos es que Halfdan Ragnarsson es considerado en las crónicas de su tiempo como rey de Northumbria, el reino cuya capital era York; o, cuando menos, que es quizá lo más probable, de Deria, que era la mitad sur de Northumbria.
El caso es que, si las crónicas no mienten, Halfdan, si fue rey en York, acabó siendo depuesto. Y lo fue por los propios vikingos. Obviamente, la razón es difícil de adverar; pero lo curioso es que algunas fuentes contemporáneas dejaron escrito que fue depuesto porque "apestaba". Cuando menos teóricamente, pues, esto convierte a Halfdan en el único rey de la Historia que perdió su corona por no ducharse. (Para más referencias, el interesantísimo libro de Alex Woolf, From Pictland to Alba.)
5.- Cuando John Wayne conoció a un ya prometedor Michael Caine, le dio dos consejos: que hablase poco, y que nunca llevase zapatos de ante. A Caine le extrañó el segundo de los consejos, y Wayne le explicó: "Algún día, entrarás en un baño a mear; a tu lado habrá un tipo meando que, cuando te vea, se volverá con la chorra en la mano diciendo: ¡Pero si es Michael Caine! Y se meará en tus zapatos de ante".
6.- Siguiendo con la misma fuente, Caine ha contado muchas veces que, estando en Filipinas, le invitaron a una fiesta en la que había un montón de gente. En un momento de la noche, la anfitriona lo llamó a un aparte y le preguntó si era un vendedor de drogas. Caine, por supuesto, lo negó rotundamente. La señora, entonces, le contestó: "Pero, entonces, ¿por qué todo el mundo le llama My Cocaine?
7.- Hay dos cosas que separan las Biblias modernas de las primeras que se conservan.
La primera es que las primeras están incompletas. En un mundo sin imprenta, cada página de un libro era un mundo, y la Biblia, en su completitud, son más de 1.000 páginas. Así que había que ser preciso en la edición, y es por eso que muchas Biblias primeras van directo a lo que buscan y pasan del resto de libros. Existen ediciones completas, pero son raras y, además, se asume que tuvieron que ser carísimas. Esto es especialmente cierto en el caso de la Iglesia oriental.
La segunda diferencia es que, contrariamente a lo que cree mucha gente, por lo que suelo ver, incluso gente de Iglesia, las Biblias antiguas no utilizan la notación capítulo-versículo a la que hoy estamos acostumbrados.
Dividir los Evangelios por capítulos fue, sin embargo, una necesidad muy temprana, dado que era fundamental poder comparar los textos, sobre todo los sinópticos. Por ello, Eusebio, escritor cristiano muerto en el 340, utilizó ya una división por capítulos que se atribuye a Amonio de Alejandría. Los salmos también fueron numerados muy pronto; y se atribuye a Eutalio la división por capítulos del Libro de los Hechos y de las Epístolas. Entonces, sin embargo, hubo autores que utilizaron otros sistemas de clasificación.
Fue a principios del siglo XIII cuando, en la universidad de París, se comenzó a usar el sistema estandarizado actual de capítulos, Normalmente se le atribuye a Stephen Langton, arzobispo de Canterbury, quien efectivamente enseñó Teología en París.
8.- Según refiere el dirigente comunista yugoslavo Miroslav Djilas en sus memorias, durante las cenas de madrugada que celebraba Iosif Stalin en su dacha de las afueras de Moscú, era común que se jugase a un tembloroso juego.
En la residencia de Stalin todo estaba controlado. De hecho, Stalin sólo vivía en casas sobre cuya seguridad él estuviese personalmente seguro. Una vez, rechazó una dacha nueva que le ofreció Beria (y en la que se habían gastado un pastón) porque el bosque que la circundaba estaba demasiado cerca.
En esa obsesión por el control, una de las cosas que se medía constantemente era la temperatura de la casa y las zonas de exterior. Así que los contertulios jugaban a irse por turnos a diferentes espacios de la casa y de la finca y, una vez allí, estimar la temperatura que hacía. La persona que fallaba, aunque sólo fuese por un grado, tenía que beber un vaso de vodka.
De alguna manera, pues, se puede decir que a Stalin le gustaba jugar a "El precio justo".
9.- Técnicamente hablando, la I Guerra Mundial no comenzó por el asesinato de Francisco José en Sarajevo. Lo que disparó su inicio fue la negativa rotunda de la Administración Serbia a que Viena enviase sus propios detectives austríacos a investigar el suceso.
10.- Dorothy Louise Eady nació el 16 de enero de 1904 en Londres. A los tres años de edad, se cayó por las escaleras de su casa y se arreó tal hostión que la dieron por muerta. Sin embargo, se recuperó perfectamente, algo que su familia siempre consideró una especie de milagro. A partir de ese momento, la pequeña Dorothy comenzó a tener sueños y visiones relacionados con el Antiguo Egipto. Se interesó mucho por el tema y comenzó a visitar el Museo Británico con su familia, hasta que llegó a la conclusión de que, en el accidente, se había abierto una especie de puerta en su interior que la conectaba con una existencia anterior en la que se había llamado Bentreshyt y había sido sirvienta en la Corte de Seti I, faraón del siglo XIII antes de nuestra era.
Dorothy estudió (aunque ella decía que lo que estaba haciendo era volver a estudiar) egiptología y escritura jeroglífica. En 1930 se trasladó a Egipto, se casó, y tuvo un hijo al que llamó Seti. Desde aquel día se puso a sí misma el apodo por el que fue conocida durante décadas: Om Seti. La madre de Seti.
Desde 1954, Om Seti vivió en Abydos. Fue la primera mujer contratada por el Consejo Supremo de Antigüedades egipcio, y terminó siendo nombrada guardiana del templo de esa localidad. Compaginó su vida entre el ejercicio de la egiptología y una serie de sueños entre místicos y eróticos que dijo tener, en los que se le aparecía el faraón Seti I. Muchos de estos sueños, aparentemente, fueron sueños eróticos, supuestamente reproduciendo los encuentros galantes que el faraón habría tenido con su sirvienta Bentreshyt.
Aparte estos episodios erótico-festivos, Om Seti fue durante muchos años una egiptóloga muy respetada, autora de varios libros de gran valía; aunque supongo que, puesto que murió en 1981, los actuales licenciados en Historia la tendrán clasificada en el cesto de "interpretaciones superadas". Su mejor libro, en mi opinión, es Abydos: holy city of Ancient Egypt. Pero no es nada fácil de encontrar.
En su calidad de guardiana del templo de Abydos, Om Seti guardaba los preceptos litúrgicos conocidos del antiguo Egipto, lo cual quiere decir que realizaba los sacrificios y ritos periódicos. De hecho, en un viejo documental de National Geographic sobre Egipto, fue grabada realizando un rito anual a la antigua usanza.