miércoles, febrero 13, 2019

Carlos III (10: lo de la economía)

Rigodones que ya hemos bailado:

El infante sin posibilidades que llegó a ser rey por ser un Farnesio
De Varsovia a Nápoles
María Amalia
En España
El rey viudo
Lo de los jesuitas
Lo de América
Lo de Marruecos
Lo del gobierno


Si hay un capítulo de eso que normalmente llamamos “gestión gubernalmental” en que el Carlos III se merece ese calificativo de excelente rey de España que, por lo general, se le otorga (todo sea dicho) con demasiada liberalidad, ése el terreno económico. Y ciertamente, Carlos III es el primer rey de la Historia de España (que ya le vale a los Habsburgo) que se da cuenta, propiamente, de una perogrullada que, desgraciadamente, todavía a día de hoy hay que ir por la vida explicando a más de un jefe de gobierno, ministro, diputado o director general. Lo dice muy claramente Floridablanca en una de sus instrucciones de gobierno: “Se ha empleado siempre más tiempo y desvelos en la exacción y cobranza de la Real Hacienda que en el cultivo de los territorios que los producen y en el fomento de sus habitantes”. Dicho de otra forma: al político español, en promedio histórico, lo que le preocupa es que se paguen los impuestos; eso de hacer políticas para que la gente esté cada vez en mejor situación de pagar esos mismos impuestos, mutatis mutandis, se la pela.

lunes, febrero 11, 2019

Pistoleros de leyenda: Pat Garret

...bueno, como esto ya va siendo toda una serie, aquí tienes otros capítulos.

Billy the Kid
Butch Cassidy
Los Dalton
La familia Earp
Wyatt Earp
Jesse James


Patrick Floyd Garret nació el 5 de junio de 1850 en Chambers County, Alabama. Era uno de seis hermanos, hijos de, dueño de una plantación sureña. Cuando tenía seis años su familia, buscando mejores perspectivas para su negocio algodonero, se trasladó a una finca de 3.000 acres en Luisiana. La guerra civil americana supuso la muerte de su padre y de su madre, por lo que Patrick hubo de colocarse muy joven en la tienda de la plantación, a tiempo completo. Ese trabajo, sin embargo, no era suficiente para sus demandas de dinero, o tal vez de ilusión; el caso es que pronto hizo como otros muchos estadounidenses y decidió marchar hacia el Oeste. Allí pasó años colocado como un auténtico cow boy en el conocido como Texas Panhandle o Mango de Texas. También fue allí cazador de búfalos hasta que recaló en Fort Sumner, Nuevo México, donde de nuevo fue ganadero, camarero e, incluso, emprendedor, puesto que abrió un pequeño restaurante. Con 29 años de edad se casó por primera vez con una mujer apenas adolescente que murió en el parto de su hijo; pero se casó muy pronto de nuevo.