lunes, diciembre 15, 2025

Ceaucescu (38): El puteo húngaro




Rumania, ese chollo
A la sombra de los soviéticos en flor
Quiero rendirme
El largo camino hacia el armisticio
Conspirando a toda velocidad
El golpe
Elecciones libres; o no
En contra de mi propio gobierno
Elecciones libres (como en la URSS)
El último obstáculo, el rey
Con la Iglesia hemos topado
El calvario uniate
Securitate
Yo quiero ser un colectivizador como mi papá
Stefan Foris
Patrascanu y Pauker
La caída en desgracia de Lucretiu Patrascanu
La sombra del titoísmo
Gheorghiu-Dej se queda solo
Ana Pauker, salvada por un ictus
La apoteosis del primer comunista de Rumania
Hungría
Donde dije digo…
El mejor amigo del primo de Zumosol
Pitesti
Pío, pío, que yo no he sido
Trabajador forzado por la gracia de Lenin
Los comienzos de la diferenciación
Pues yo me voy a La Mutua (china)
Hasta nunca Gheorghe
El nuevo mando
Yo no fui
Yo no soy ellos
Enemigo de sus amigos
Grandeza y miseria
De mal en peor
Esos putos húngaros
El puteo húngaro
El maldito libro transilvano
El sudoku moldavo
La fumada de Artiom Lazarev
Viva Besarabia libre (y rumana)
Primeras disidencias
Goma
Los protestantes protestan
Al líder obrero no lo quieren los obreros
Brasov
No toques a Tokes
Arde Timisoara
El derrumbador de iglesias y monasterios
Qué mal va esto
Epílogo: el comunista que quiso sorber y soplar a la vez


La nueva estrategia de Gheorghiu-Dej comenzó por la enseñanza en húngaro en las escuelas, que fue notablemente obstaculizada. La principal institución de esa educación era la Universidad Bolyai en Cluj, junto con la universidad agrícola Petru Groza, en la misma ciudad; y, quizás, también la facultad de Medicina de Targu-Mures. Pero estas instituciones comenzaron a ser progresivamente desmanteladas a partir de 1956. Fundamentalmente, la Universidad Bolyai fue fusionada con la universidad Babes de Cluj, que era un centro rumanoparlante. Lazslo Szabedi, un miembro de la universidad Bolyai, respondió a esos movimientos suicidándose.