A los ojos de este simple lector de
historias pasadas, resulta sorprendente lo poco, por no decir
poquísimo, que habitualmente se habla de la república veneciana
cuando se tratan los ejemplos del pasado, digamos, meritorios. Quien
no encuentra interesante la historia de la aventura veneciana está
dando de lado un experimento que consiguió, entre otras cosas,
mantener un monopolio económico durante un milenio; esto es algo que
está fuera del alcance de la mayoría de los mortales que viven
fuera de El Vaticano.